Con el tiempo, sin embargo, y en buena medida como consecuencia del desarrollo civilizatorio, dicha cualidad pasó a un segundo plano y estar al tanto del semejante perdió importancia. Aunque por fortuna no se perdió del todo, y de tanto en tanto nos enteramos de sucesos que nos revelan que a pesar del egoísmo y la individualidad que se fomenta de muy diversas maneras, el pulso del bien común todavía se encuentra en nosotros.
Así es posible entender un suceso ocurrido este lunes en Japón, en donde unas cuarenta personas trabajaron colectivamente para mover un tren de aproximadamente 32 toneladas de peso para rescatar a una mujer de aproximadamente 30 años que se encontraba atrapada en un hueco entre el andén y las vías.
La acción se dio en la estación JR Minami-Urawa, en el norte de Tokio.